Ficus Sycomorus
Hablamos de un árbol de hoja perenne aunque en algunos climas puede ser de hoja caduca
Otros nombres
Sicomoro, Sycamore, Fig-mulberry , Figuier sycamore, falsa higuera, higuera egipcia
Familia
Esta planta pertenece a la familia de las Moraceae.
Origen
Es nativo de África países como Senegal, Namibia ,Libano o Madagascar
Descripción
Hablamos de un árbol de hoja perenne aunque en algunos climas puede ser de hoja caduca.
Puede llegar a medir casi 20 metros de altura por unos 6 de anchura; tiene una copa densa .
La corteza tiene un color verde amarillenta y se puede arrancar en tiras, al hacer esto, podemos observar debajo de la corteza un tronco amarillento.
Las hojas son acorazonadas, de color verde oscuro con los nervios bien matizados en color claro, son grandes y ásperas; aparecen en espiral rodeando las ramas.
Producen gran cantidad de frutos durante todo el año, higos comestibles de unos 3 centímetros y de color que inicialmente es verde para posteriormente volverse de color amarillo y rosa. Aparecen en gran cantidad por las ramas o por el tronco.
Mantenimiento
Se cultiva en el exterior a pleno sol, prefiere los suelos profundos y francos antes que los arcillosos. Es posible cultivarlos en suelos arenosos pero con humedad a poca profundidad.
No resiste las heladas fuertes aunque puede soportar un poco de frío.
Multiplicación
Se multiplican fácilmente por esquejes.
Plagas y enfermedades
Pueden ser atacados por cochinilla algodonosa.
Curiosidades
Fue una planta muy extendida en Egipto aunque hoy día casi no se ven ejemplares parece que el motivo es que ya no se encuentra la avispa Ceratosolen arabicus que los poliniza.
Se sabe que fue muy común en Egipto por los ataúdes que se han encontrado construidos con la madera del sicomoro.
No hay que confudir los Ficus sicomoros con los Sicomoros europeos ya que estos son el Acer pseudoplatanus ni tampoco confudirlo con el sicomoro americano, tanto el de California o Platanus racemosa o el sicomoro de Arizona o Platanus wrigfhtii.
Tiene un uso muy antiguo en la medicina natural, en el Dioscórides se dice que el zumo de la corteza tiene propiedades cicatrizantes, sudorífico o como ungüento contra las picaduras de las serpientes.